Desmaquillarse correctamente es una rutina infalible para el cuidado de la piel. La clave está en cumplir con un buen hábito de higiene con el fin de dejar que la piel del cutis respire.

El maquillaje forma parte de nuestro día a día, pero, si no lo retiras al final del día esto puede perjudicar gravemente la salud de tu piel.    

Para evitar las terribles consecuencias de no cuidar la piel, te aclararemos cómo puedes mantener una dermis hermosa. Continúa leyendo para que conozcas los pasos correctos que te llevarán a mantenerte radiante. 

¿Cuáles son los errores más comunes al desmaquillarse? 

En primer lugar, para desmaquillarse hay que conocer nuestro tipo de piel. En el mercado hay infinidades de productos, pero a veces adquirimos uno que no está hecho para nuestra piel. De manera que fallamos al intentar crear una rutina efectiva.

Asimismo, debes enfocarte en utilizar productos específicos para tu edad y zona de la cara. Por ejemplo, no es lo mismo lociones para el cuidado del rostro que para los ojos. Muchos contienen perfumes, químicos y alcohol, que son altamente irritantes. 

También, no es recomendable en tu rutina de noche lavarte con agua muy caliente. Lo mejor es recurrir al agua templada y en seguida agua fría para inducir el cierre de los poros.

¿Cuáles son las consecuencias de desmaquillarse incorrectamente?

El acto de desmaquillarse no te debe llevarte más de 10 minutos. Si evitas remover el maquillaje cada día o aplicar una rutina de noche pueden aparecer síntomas desagradables. A continuación, te contamos cuáles son los más comunes:

  • Aceleramiento en la aparición de arrugas
  • Obstrucción de los poros
  • Irritación de la piel
  • Nacimientos de orzuelos
  • Tendencia a desarrollar rosácea
  • Aparición de ojeras
  • Resequedad en el rostro

Sigue este paso a paso para desmaquillarte correctamente

  1. Lávate las manos. No olvides que nuestras manos pasan por todos lados y suelen recoger impurezas y bacterias. Por consiguiente, debemos evitar tocarnos la cara si no las hemos lavado antes. 
  2. Recurre a los discos de algodón o pañuelos. Es ideal utilizar un trozo de algodón o un pañuelo en cada lado del cutis. De esta manera nos aseguramos una limpieza perfecta sin esparcir residuos. 
  3. Hazlo con movimientos ascendentes. Nuestra piel es muy delicada, por ende, para el cuidado del rostro es fundamental hacerlo con movimientos suaves y delicados. Debes practicar una limpieza de adentro hacia fuera, siendo esta es la manera de alcanzar resultados óptimos. 
  4. Comienza por los ojos. Esta parte del rostro necesita un producto especial para despintar los ojos. Retira sombras, rímel y delineador para cuidar tus párpados. Después, retira la pintura de labios (aunque pienses que se ha desvanecido durante el día, siempre quedan restos). Hay cremas indicadas para estas partes tan sensibles de la cara, pero te recomendamos que pongas atención en su composición.  
  5.  Continúa con el rostro. Desde la frente vas a comenzar a esparcir el limpiador de la cara con movimientos circulares ascendentes. Recuerda que el producto debe corresponder a tu tipo de piel. No pases por alto las cejas y el cuello.  
  6. Utiliza agua micelar. Eliminar el maquillaje con agua y jabón no es suficiente, de hecho podrían resecar la piel de la cara. Aplicar agua micelar o leche limpiadora son las opciones número uno para las pieles deshidratadas. 
  7. Aclara la piel con una loción. Lo siguiente al agua micelar o leche limpiadora es aclarar con un algodón la loción de enjuague.  

En conclusión, desmaquillarse adecuadamente es elemental para conservar un rostro saludable. Agrega a tu rutina de noche estos pasos y verás excelentes resultados.

Te esperamos en Margot para cuidar de tu piel adecuadamente.

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